Tu rostro produce grasa y está bien

Aunque no lo creas, la grasa cumple un rol fundamental en el bienestar corporal: protege los órganos internos, proporciona energía, regula la presión, estimula la producción de elementos básicos para la formación de hormonas y contribuye a la absorción de vitaminas.

Además, la grasa facial es necesaria para mantener la piel humectada, brillante y le otorga al rostro el contorno y las dimensiones características de un cutis joven. Conforme pasa el tiempo, la pérdida de grasa más bien denota la edad.

La grasa hace que tu piel se vea joven

Durante la juventud la grasa se distribuye por todo el rostro, acumulándose especialmente en ciertas partes como la frente, las mejillas, el contorno de los ojos y la boca. A medida que vamos creciendo, esa capa se adelgaza y comienza a responder a la gravedad, lo que se traduce en la caída de ciertas zonas como la barbilla y el cuello, además del surgimiento de arrugas y líneas de expresión.

Grasas buenas y grasas malas

La grasa es necesaria para mantener un rostro sano y hermoso, y la principal forma de obtenerla es a través de los alimentos, pero eso no quiere decir que debamos comer cualquiera que tenga un alto porcentaje de esa sustancia.

Existen 3 tipos de grasa, unas mejores que otras y tienen diferentes efectos en el cuerpo. Respecto a las que no son tan positivas tenemos a las grasas trans, que están en la mayoría de los productos procesados; y a las grasas saturadas, que se encuentran principalmente en la carne roja, la leche, la pasta, el pan y cuyo consumo no debe exceder el 10% de calorías al día.

Por otra parte se encuentran las grasas insaturadas, que son altamente recomendables para mantener la piel en perfectas condiciones, y provienen especialmente de fuentes vegetales como aceite de oliva, cacahuates, aguacate, frutos secos, sardinas o salmón.

Exceso de grasa y cómo controlarlo

La grasa no es tan mala en realidad y de hecho es necesaria, pero este componente también puede causar estragos en la salud del cutis si se consume o genera en exceso, convirtiéndose en granitos, espinillas y todos los inconvenientes que vienen con ellos. Por eso es importante saber cómo mantener una cantidad suficiente y equilibrada de ella.

  • Mantén una alimentación equilibrada rica en vitaminas, minerales y mucha fibra.
  • Limita tu consumo de comida chatarra y alimentos procesados.
  • Toma suficiente agua a lo largo del día.
  • Haz ejercicio.

Si quieres obtener todos los beneficios de la grasa en tu cara y reducir al máximo sus efectos negativos, asegúrate de incluir a los hábitos anteriores: lavar tu rostro dos veces al día, utilizar productos específicos para tu tipo de piel y usar siempre crema hidratante y bloqueador con factor de protección solar mínimo de 30.

Tu rostro produce grasa naturalmente y eso está bien, solo recuerda mantenerla en los niveles correctos cuidando tu piel todos los días.

 

 

 

 

Fuentes: 1) Harvard Health Publishing, Why your face ages and what you can do, Healthbeat, Harvard Medical School, Estados Unidos. 2) Harvard Health Publishing, Know the facts about fats, Harvard Men’s Health Watch, Harvard Medical School, Estados Unidos, 2018. 3) Harvard Health Publishing, The truth about fats: the good, the bad, and the in-between, Harvard Medical School, Estados Unidos, 2018. 

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